Nada en la vida es tan serio como parece. La seriedad le quita el gusto a las cosas, y la risa le devuelve el gusto real a las cosas. Si hoy la risa es a veces inadecuada, es porque le quitaría a algunas situaciones no sólo la seriedad, sino incluso la razón de existir: a la luz de la risa las cosas se muestran más como son realmente, y la realidad adquiere un nuevo orden.

Indudablemente habrá muchas cosas que percibirás de otro modo luego de hacer bien el amor: el sexo profundo te cambiará hasta los cimientos, te convertirá en ti mismo —y cuando menos, cambiará tu modo actual de jerarquizar las cosas. El sexo profundo generará risa en tu vida, una risa sabia, demoledora de infelicidades y dificultades. Lleva empeño lograrlo, pero vale la pena.

Hacer el amor bien, te dará una gran dosis de gozos, sonrisas, risas, buen humor y ganas de vivir. La risa que genera hacer el sexo bien nace directamente desde el cuerpo, desde el corazón: ríes de gozo y felicidad, por el simple hecho de que el cuerpo desea reír. La risa verdadera y sentida no tiene un motivo: es pura expresión, no significa nada, y si significa algo es simplemente gozo y felicidad.

Cosas humanas muy serias —incluso cosas humanas que durante milenios han sido serias—, dejarán de serlo para ti, porque justo al lado de lo que antes considerabas serio, renacerán argumentos muy fuertes para vivir realmente feliz y menos serio o rígido a partir de ahora: un cielo muy azul, el viento fresco, los árboles, el sol que lo alumbra todo, la gracia incomparable de la mujer que lo alumbra todo más que el sol, luego la noche que lo indefine todo, y finalmente, la muerte, la mejor perspectiva: el amor te hace consciente de la muerte, de lo efímero y de lo mucho que vale cada instante. Paradójicamente, ser consciente de la muerte le da a la vida más alegría y felicidad.

A la luz de todo esto, percibirás la vida real, que hacía mucho tiempo que no percibías —escondido como estabas detrás del milenario muro de palabras e ideas que llamamos ego. Sentirás la vida real, luminosa, colorida, que por arte de magia hace que todo lo serio humano se muestre como realmente es: gris y sin sentido. Percibirás como por primera vez todo lo que en la Tierra desde hace mucho te está diciendo que la vida humana no es tan seria como parece, y que sólo por tomárnosla tan en serio es que hemos sufrido tan enormemente. Ya es hora de dejar de sufrir y comenzar a reír de gozo.

El amor sexual hará que tu conciencia vuelva a ser flexible y veloz, y percibirás que la realidad en realidad no está hecha: la haces constantemente y depende de ti como sea lo real —para bien o para mal. Eso es verdadera libertad. Desde ahora hazlo para bien. Depende de ti.